S de S S de S S de S

SILENCIOS DE SILICIO



ella me dijo que se tenía que arreglar, y yo no sabía que estaba estropeada...

aha

aha

¡¡¡MALA HOSTIA!!!

No tengo ni puta idea por qué la luna parece un huevo frito de clara oscura
y me sudan los cojones si tus besos son de seda o la mortaja de un coitus interruptus. 

Me abriría la cabeza contra una pared para no ver más obras de teatro basadas en el imaginario de los testículos, me ataría dinamita por todo el cuerpo para detonar los tipos de interés de esos tipos tan poco interesantes. 

Estoy dispuesto a cruzar el centro de Madrid con una katana cortando cabezas, porque sé que sus cuerpos seguirían yendo y viniendo y yendo y viniendo, 
y por qué no... me masturbaría en la cara de los políticos para que vieran de cerca mi aguerrida y violenta polla... 

y aún así, 
aunque me importe una mierda que la luna me mire como una madre, que el teatro esté iluminado por apagados, que los bancos se sienten sobre las personas, que el centro de Madrid sea la excusa para una multitud descabezada, que mis pajas caigan sobre caras yermas,  
lo que más me pone de mala hostia es que tus besos huyan y me obligues al silencio.